Documentos judiciales revelan que OpenAI y Anthropic evaluaron una fusión tras el despido de Sam Altman en 2023

Una nueva declaración judicial ha revelado un episodio poco conocido en la historia reciente de OpenAI. Según documentos presentados en el marco de la demanda de Elon Musk contra la compañía, el consejo de administración de OpenAI exploró en 2023 la posibilidad de fusionarse con Anthropic, su principal rival en el campo de la inteligencia artificial.

Ilya Sutskever, cofundador y entonces científico jefe de OpenAI, explicó que las conversaciones se produjeron inmediatamente después del despido de Sam Altman el 17 de noviembre de 2023. El testimonio forma parte de una declaración de diez horas tomada en San Francisco el mes pasado, cuyos fragmentos fueron incorporados a los documentos judiciales publicados este lunes.

Sutskever relató que la propuesta habría otorgado a Anthropic el control de la entidad fusionada, una idea que despertó entusiasmo entre varios miembros del consejo, pero que él mismo rechazó de forma tajante.

Un intento de fusión durante la crisis interna

La destitución de Altman sacudió a la empresa y provocó una ola de dimisiones y protestas internas. Durante aquellos días, el consejo debatió cómo mantener la estabilidad de OpenAI y evitar una fuga masiva de talento. Entre las opciones surgió una propuesta de fusión con Anthropic, liderada por los hermanos Dario y Daniela Amodei, ambos antiguos directivos de OpenAI.

“Recuerdo que Anthropic expresó su entusiasmo por la idea y mencionó algunos desafíos prácticos”, declaró Sutskever. Pese a ello, las conversaciones duraron poco y no avanzaron más allá de una fase inicial. Según su testimonio, él se mostró “muy descontento” con la posibilidad y fue uno de los pocos que se opusieron dentro del consejo.

El despido de Altman duró apenas cinco días, y el 22 de noviembre de 2023 fue restituido en su cargo tras la presión de empleados, inversores y del socio principal de OpenAI, Microsoft.

El contexto de la demanda de Elon Musk

La revelación se produjo en el marco de la batalla legal que Elon Musk mantiene con OpenAI y su director ejecutivo. Musk acusa a la compañía de desviarse de su misión original sin fines de lucro y de beneficiarse indebidamente de su alianza con Microsoft, a quien considera un socio dominante en la dirección de la empresa.

El juez federal que supervisa el caso ha ordenado una segunda declaración de Sutskever para aclarar su papel en el consejo y sus posibles intereses financieros en la compañía. OpenAI, por su parte, sostiene que las acusaciones de Musk carecen de fundamento y responden a un intento de desacreditar su trabajo en el campo de la inteligencia artificial.

El propio Altman ha restado importancia a las críticas y asegura que la nueva estructura de la empresa garantiza que los beneficios se alineen con el interés público, manteniendo el foco en el desarrollo seguro de la IA.

Un episodio que marcó a la industria

La breve crisis de noviembre de 2023 sigue considerándose uno de los momentos más turbulentos en la historia de OpenAI. En apenas unos días, la compañía estuvo al borde de un colapso interno y de una posible absorción por parte de un competidor directo. La fusión nunca se concretó, pero dejó al descubierto las tensiones internas sobre la dirección y el propósito de la organización.

Dos años después, las revelaciones del testimonio de Sutskever muestran hasta qué punto OpenAI estuvo dispuesta a considerar medidas drásticas para sobrevivir a aquella tormenta. Hoy, Altman continúa al frente de la empresa, mientras Sutskever dirige su nueva compañía, Safe Superintelligence, centrada en el desarrollo responsable de sistemas avanzados de IA.