De influencers a referentes: ¿dónde quedaron los modelos que nos inspiran de verdad?
En un mundo donde los algoritmos definen la atención pública y la popularidad digital se confunde con autoridad moral, surge una pregunta urgente: ¿a quiénes estamos siguiendo y por qué? Las redes sociales han cambiado la forma en que elegimos nuestros modelos, pero ¿nos están inspirando realmente o solo nos están entreteniendo?
Autor - Aldo Venuta Rodríguez
3 min lectura
La popularidad ya no es sinónimo de mérito. Las redes sociales han democratizado la visibilidad, pero también han distorsionado el concepto de admiración. Hoy, un adolescente puede conocer más sobre los hábitos de un influencer viral que sobre los logros de un científico, un activista o un pensador. No se trata de nostalgia ni de menospreciar a quienes hacen carrera en el ámbito digital. El problema es que muchos de los rostros más visibles no ofrecen profundidad, ni responsabilidad, ni visión a largo plazo.
Según un estudio del Pew Research Center, más del 70 % de los adolescentes en Estados Unidos afirman que les gustaría ser “youtubers” o “tiktokers” cuando crezcan. Lo preocupante no es la elección profesional, sino el tipo de contenido que los impulsa, bromas, retos sin sentido, consumo ostentoso y discursos vacíos de compromiso. La influencia sin propósito es una oportunidad perdida.
En contraste, líderes que sí están transformando el mundo rara vez gozan del mismo protagonismo. Nombres como Malala Yousafzai, Jane Goodall o José Andrés (el chef que alimenta a miles en zonas de guerra) quedan relegados a menciones esporádicas, eclipsados por tendencias fugaces. Esto evidencia una brecha entre lo que necesitamos como sociedad y lo que el ecosistema digital nos ofrece por defecto.
La clave está en redefinir qué entendemos por referente. Un verdadero modelo no solo entretiene, sino que aporta, enseña, conmueve, moviliza. No es quien más seguidores tiene, sino quien más impacto real genera. Esto no excluye a los creadores de contenido; al contrario, muchos de ellos están empezando a asumir ese rol con conciencia, como lo demuestra el auge del contenido educativo, el activismo ambiental juvenil o la divulgación científica en TikTok y YouTube.
Lo que necesitamos es una nueva ética de la influencia. Un pacto tácito entre quien comunica y quien consume: contenido con propósito, audiencias más críticas, plataformas que premien el valor sobre la viralidad. Esto implica un cambio cultural profundo, que debe comenzar desde la educación, pero también desde las políticas tecnológicas y los medios tradicionales.
Si queremos una generación capaz de resolver los desafíos del siglo XXI —cambio climático, polarización social, desinformación, crisis de liderazgo— necesitamos más voces que inspiren con coherencia, y menos pantallas que solo entretengan. Porque en un mundo con exceso de información, el verdadero poder está en saber a quién escuchar.
La cultura de la fama digital no es en sí misma el problema, pero sí lo es su falta de profundidad. Como sociedad, debemos exigir más de quienes influyen en millones y, sobre todo, buscar referentes que no solo nos distraigan, sino que nos impulsen a ser mejores. Los modelos que realmente inspiran siguen ahí. Solo hay que volver a mirar en la dirección correcta.
Preguntas frecuentes
Pueden influir en cómo piensan, actúan y sueñan. Todo depende del tipo de contenido, algunos inspiran, otros solo entretienen sin aportar valor.
No es malo. Lo importante es el propósito, crear contenido con sentido, no solo buscar fama rápida.
Sí. Personas como Malala Yousafzai o Jane Goodall siguen inspirando con hechos, no solo con visibilidad.
Valorando el contenido con propósito, siendo críticos como audiencia y apoyando voces que realmente suman.
Continúa informándote
Meta entra en el negocio energético para asegurar electricidad a sus centros de datos
Meta entra en el negocio energético para impulsar nuevas plantas eléctricas y garantizar la enorme demanda de sus centros de datos de inteligencia artificial
Por qué no debes dejar que la IA haga tus tareas escolares
Usar IA para hacer tareas puede parecer práctico, pero frena tu aprendizaje, debilita tu escritura y puede acabar en errores y problemas académicos
Documentos judiciales acusan a Meta de ocultar pruebas internas sobre daños de sus redes sociales
Documentos de una demanda en EE. UU. revelan que Meta habría ocultado hallazgos internos que vinculaban Facebook con efectos negativos en la salud mental de los usuarios, especialmente jóvenes
Google lanza Nano Banana Pro, su modelo de imagen más preciso y gratis para todos
Google presenta Nano Banana Pro, su nuevo modelo de imagen integrado en Gemini que ofrece más resolución, más control creativo y generación gratuita con límites de uso
El uso creciente de la IA en EE. UU. genera ya casi un millón de toneladas de CO₂ anuales
Un nuevo estudio calcula que la adopción acelerada de la inteligencia artificial en Estados Unidos suma cerca de 900.000 toneladas de CO₂ cada año, un aumento modesto en el conjunto de emisiones del país
Juez del caso AdTech pide acelerar una posible ruptura del negocio publicitario de Google
La jueza Leonie Brinkema presiona al Departamento de Justicia y a Google para definir cuánto tardaría en aplicarse una venta forzada de su plataforma publicitaria AdX