Tormentas, incendios y olas de calor: ¿cómo impactan en la conciencia climática de la población mundial?
La investigación publicada en Nature Climate Change revela que la conciencia climática depende más de cómo atribuimos los fenómenos extremos que de haberlos vivido en primera persona
Autor - Aldo Venuta Rodríguez
3 min lectura
Inundaciones, incendios o huracanes marcan la vida de millones de personas cada año, pero no siempre generan una mayor preocupación por el clima. Lo determinante, según un nuevo estudio, es si la gente asocia estos eventos con el cambio climático.
El trabajo, liderado por la Universidad SWPS de Polonia junto a un consorcio internacional, encuestó a ciudadanos de 68 países y cruzó sus percepciones con datos objetivos de exposición a desastres naturales. Este enfoque permitió comparar experiencias reales con creencias personales.
Un análisis global de percepciones y realidades
Los investigadores utilizaron la plataforma CLIMADA para calcular qué poblaciones estuvieron más expuestas a fenómenos extremos en la última década. Luego, contrastaron esos datos con encuestas que preguntaban si las personas atribuían estos eventos al calentamiento global.
El resultado mostró que la mera exposición no basta, quienes creían que las tormentas o incendios estaban causados por el cambio climático eran mucho más propensos a apoyar medidas de mitigación. Lo sorprendente es que esto ocurría incluso en lugares donde los episodios eran poco frecuentes.
El vínculo entre percepciones y políticas climáticas
El apoyo público se concentró en medidas como la protección de bosques y la inversión en energías renovables. Más del 80 % de los encuestados se mostró a favor de estas iniciativas, reflejando un consenso global amplio en torno a la protección de recursos naturales.
En cambio, los impuestos al carbono generaron un fuerte rechazo, solo el 22 % apoyó gravar los alimentos con alta huella de carbono y el 29 % los combustibles fósiles. Aquí la percepción de justicia social influyó más que la conciencia climática, pues muchas personas lo asociaron a un castigo económico directo.
La investigación advierte que los gobiernos deben diseñar políticas realistas. Las más coercitivas suelen ser impopulares, mientras que aquellas que refuerzan bienes comunes reciben mayor aceptación ciudadana y crean un terreno más fértil para la acción climática a largo plazo.
Diferencias regionales y sociales en la conciencia climática
Los países africanos y asiáticos presentaron los niveles más altos de apoyo a la acción climática, mientras que Europa mostró un compromiso intermedio y Rusia se situó en los niveles más bajos. Estas diferencias reflejan desigualdades en la exposición y en la percepción del riesgo climático.
Entre los factores sociodemográficos destacan los hombres jóvenes, con mayor educación, ingresos más altos y que viven en ciudades, como los más proclives a respaldar regulaciones ambientales. El nivel de religiosidad y el poder adquisitivo también jugaron un papel importante en las respuestas.
Un cambio de paradigma en la acción climática
El estudio concluye que lo crucial no es haber vivido un desastre, sino cómo lo interpretamos. Si se percibe como un síntoma del cambio climático, se fortalece el apoyo social a políticas verdes. En cambio, cuando se ve como un evento aislado, la conciencia climática apenas varía y la acción colectiva se debilita.
Preguntas frecuentes
El estudio muestra que no basta con vivir tormentas, incendios u olas de calor, lo decisivo es si las personas los atribuyen al cambio climático.
La protección de bosques y la inversión en energías renovables son las más respaldadas, con más del 80 % de apoyo a nivel global.
Los impuestos al carbono, tanto sobre alimentos con alta huella climática como sobre combustibles fósiles, reciben poco apoyo por su impacto económico.
Sí, el apoyo a la acción climática es más alto en África y Asia, intermedio en Europa y bajo en Rusia. Factores como edad, educación o ingresos también influyen.
Continúa informándote
Aumenta la presión sobre los pingüinos africanos: la pesca invade sus zonas de alimentación
Un nuevo estudio revela que la escasez de peces obliga a los pingüinos africanos a coincidir con barcos pesqueros, intensificando la competencia por alimento en una especie en peligro crítico
¿Puede el océano absorber nuestro exceso de CO₂? La ciencia dice que todavía no estamos preparados
El océano podría ayudar a capturar parte del CO₂ que calentará el planeta, pero los expertos advierten que las tecnologías marinas aún no están listas ni pueden verificarse con seguridad
Investigadores demuestran que los satélites permiten medir la adaptación al clima incluso en las regiones más remotas
Un estudio internacional revela que los satélites permiten evaluar la adaptación climática incluso en regiones remotas, ofreciendo datos globales clave para agricultura, biodiversidad y salud
Las aguas costeras se acidifican a un ritmo más rápido de lo esperado, amenazando economías y ecosistemas
Un estudio de la Universidad de St Andrews revela que las zonas costeras se acidifican más rápido de lo previsto por el CO₂ atmosférico, poniendo en riesgo la pesca y los ecosistemas marinos
Aclarear un bosque puede alterar su papel como sumidero o fuente de carbono
Investigadores finlandeses comprobaron que el aclareo forestal puede convertir temporalmente los bosques en fuentes de carbono y afectar su capacidad de recuperación a largo plazo
Las Maldivas podrían sufrir inundaciones extremas cada dos años debido al aumento del nivel del mar
Un estudio advierte que las Maldivas podrían sufrir inundaciones severas cada dos o tres años antes de 2050 debido al aumento del nivel del mar, poniendo en riesgo comunidades y ecosistemas