¿Pagar a los robots por trabajar? La propuesta que puede transformar la economía humana
La idea de otorgar un “salario” a las máquinas reabre el debate sobre el futuro del trabajo, la redistribución de riqueza y el papel de la inteligencia artificial en la economía
4 min lectura
Autor - Aldo Venuta Rodríguez

Durante siglos, el trabajo fue visto como una actividad exclusivamente humana. Hoy, sin embargo, los robots y los sistemas de inteligencia artificial realizan tareas que antes parecían reservadas a la mente y las manos de las personas. Surge entonces una pregunta provocadora: ¿tendrían estas máquinas que “cobrar” por sus servicios?
La idea de pagar a los robots por trabajar no es un chiste de ciencia ficción. En los últimos años, empresarios y académicos han planteado que, si las máquinas reemplazan a millones de trabajadores, deben integrarse de algún modo a la estructura económica. No se trata de que los robots gasten en un supermercado, sino de canalizar esos ingresos hacia la sociedad.
El argumento a favor es sencillo: si un robot genera valor productivo, ese valor debería registrarse en forma de salarios o impuestos. En la práctica, esos fondos podrían nutrir sistemas de renta básica universal, subsidios sociales o programas de formación para quienes queden desplazados por la automatización.
El economista Erik Brynjolfsson, del MIT, ya advirtió que la automatización sin un marco redistributivo amplía la brecha entre dueños de capital y trabajadores. Bajo este enfoque, los robots serían empleados virtuales cuyos “sueldos” irían al Estado, como si cotizaran en la seguridad social.
Pero no todos lo ven con buenos ojos. Los críticos sostienen que pagar a un robot equivale a otorgarle derechos que no le corresponden. Una máquina no siente hambre, ni fatiga, ni necesidad de vivienda. Hablar de salarios para robots sería una ficción legal que distorsiona el mercado y confunde responsabilidades.
Otros añaden que lo que realmente debería gravarse no es el trabajo del robot, sino las ganancias extraordinarias que obtienen las empresas al incorporarlos. Si un sistema automatizado sustituye a cien empleados, los impuestos deben recaer sobre los beneficios del empleador, no sobre una nómina artificial de androides.
Aun así, la propuesta tiene un atractivo político: ofrece una narrativa clara de justicia redistributiva. En un futuro donde millones de personas puedan quedar desempleadas por la IA, la idea de que “los robots paguen impuestos” suena comprensible y hasta tranquilizadora para la opinión pública.
Desde la perspectiva ética, el debate abre otra cuestión: ¿queremos que las máquinas tengan un estatus cuasi laboral? Si hoy se discute sobre la “personalidad electrónica” para la inteligencia artificial, mañana podríamos enfrentarnos a dilemas jurídicos sobre propiedad, derechos y deberes de sistemas no humanos.
En términos prácticos, algunos países ya exploran medidas similares. Corea del Sur aplica desde 2018 una política que reduce los beneficios fiscales a empresas que sustituyen mano de obra por robots, lo que en la práctica funciona como un “impuesto indirecto” a la automatización.
Lo que está en juego no es solo la viabilidad de un salario robótico, sino el modelo de economía que queremos construir. Una opción es dejar que las grandes corporaciones concentren la riqueza que producen las máquinas. Otra, distribuir parte de esos beneficios para sostener el contrato social en la era digital.
La comparación con la revolución industrial resulta inevitable. En aquel entonces, las máquinas de vapor reemplazaron miles de empleos, pero también crearon nuevas industrias. La diferencia es que la inteligencia artificial amenaza con sustituir no solo trabajos manuales, sino también tareas cognitivas, reduciendo el margen de adaptación laboral.
Quizá pagar a los robots sea un símbolo más que una medida realista. Un recordatorio de que la automatización no puede concebirse únicamente en términos de eficiencia, sino también de justicia social. La pregunta no es si los robots merecen un sueldo, sino cómo aseguramos que la humanidad no quede fuera de los beneficios de su propio ingenio.
La economía del futuro no se decidirá en los laboratorios de Silicon Valley, sino en el campo político y social. Lo que se decida sobre los robots será, en el fondo, una decisión sobre nosotros mismos: sobre qué clase de mundo queremos habitar cuando las máquinas trabajen más y los humanos trabajen menos.
Preguntas frecuentes
- 💬 En registrar un “salario” a las máquinas para canalizarlo hacia impuestos o renta básica.
- 💬 Economistas y tecnólogos que buscan reducir la desigualdad causada por la automatización.
- 💬 Que los robots no tienen necesidades y que los impuestos deben recaer sobre empresas, no máquinas.
- 💬 Podría financiar sistemas sociales y redefinir la relación entre empleo humano y automatización.
Continúa informándote

Tesla recupera la palanca de intermitentes en el Model 3, pero instalarla costará 300 euros
Tesla responde a las quejas de los conductores y devuelve la palanca de intermitentes al Model 3 tras la polémica de los mandos táctiles

Google informa el consumo energético real de una consulta en su IA Gemini
Una petición de texto en Gemini consume apenas 0,24 Wh de energía y 0,03 gramos de CO₂, según Google, lo que equivale a ver la televisión menos de nueve segundos

GPT-5 decepciona a los usuarios comunes pero gana terreno en las grandes empresas
El último modelo de OpenAI no cumplió las expectativas de los usuarios comunes, pero se consolida en el mercado corporativo gracias a su precisión y bajo costo

Zuckerberg rechazó unirse a Musk en su oferta multimillonaria por OpenAI
Elon Musk intentó sumar a Mark Zuckerberg a su oferta por OpenAI, valorada en 97.400 millones de dólares, pero el CEO de Meta se negó

Estas son las 10 marcas más valiosas del mundo en 2025
En 2025, el ranking global de Brand Finance confirma el dominio tecnológico de Estados Unidos y el crecimiento acelerado de nuevas potencias como NVIDIA y la china State Grid
Continúa informándote

Tercer acercamiento aéreo ruso en siete días obliga a Estados Unidos a desplegar cazas en Alaska
NORAD interceptó por tercera vez en una semana un avión ruso en la ADIZ de Alaska sin que ingresara en espacio aéreo soberano de EE. UU.

Gribshunden: el buque danés de 1495 que explica la artillería que abrió la era colonial
El naufragio del Gribshunden, hundido en 1495 en Ronneby, revela artillería y tácticas usadas en la expansión europea, tras 1492 gracias a modelos 3D

¿Dónde estarías a salvo? La IA predice los lugares seguros y los primeros en caer si estalla una guerra mundial
La inteligencia artificial simuló escenarios de una Tercera Guerra Mundial y señaló países seguros como Islandia, Nueva Zelanda y Suiza, así como ciudades vulnerables como Washington, Moscú y Tel Aviv

¿Es real una invasión estadounidense a Venezuela o solo un teatro geopolítico?
La posibilidad de una invasión a Venezuela regresa al debate internacional tras el despliegue militar ordenado por Washington. ¿Se trata de un plan real o de una jugada de presión política?

Desarrollan molécula que impulsa la fotosíntesis artificial y acerca los combustibles solares
Un equipo de químicos suizos creó una molécula que almacena cuatro cargas eléctricas con luz, paso clave para producir combustibles solares neutros en carbono

China levanta una megapresa en el Tíbet y crecen los temores de conflicto por el agua en India
China construye una megapresa en el Tíbet y aumenta la preocupación en India por un posible conflicto por el agua que afectaría a millones de personas

Científicos datan el nacimiento de Júpiter gracias a diminutas gotas de roca fundida en meteoritos
Científicos datan el nacimiento de Júpiter gracias a diminutas gotas de roca fundida en meteoritos que revelan la historia temprana del sistema solar

Periodistas entre las víctimas mortales de un bombardeo israelí a hospital de Gaza
Periodistas figuran entre los fallecidos en el bombardeo israelí contra el Hospital Nasser de Gaza que dejó al menos 15 muertos según autoridades

GPT6 llegará con memoria y personalización anuncia Sam Altman
GPT6 traerá memoria y ajustes personalizados para los usuarios de ChatGPT según confirmó Sam Altman en un evento en San Francisco

Nayuta Space sorprende con su propuesta de cohetes que aterrizan en horizontal
La compañía china Nayuta Space propone un sistema de aterrizaje horizontal para cohetes, una alternativa al modelo vertical que domina SpaceX