Científicos descubren que 7.000 represas movieron el eje de rotación de la Tierra
Estudio revela que la acumulación masiva de agua en embalses desde 1835 desplazó los polos geográficos más de un metro y redujo el nivel del mar 21 milímetros
Autor - Aldo Venuta Rodríguez
4 min lectura
Un revolucionario estudio publicado en Geophysical Research Letters ha revelado que la construcción masiva de represas durante los últimos dos siglos tuvo un impacto geofísico inesperado: la acumulación de agua en casi 7.000 embalses a nivel global provocó un desplazamiento del eje de rotación de la Tierra, moviendo los polos geográficos aproximadamente un metro en total.
La investigación, liderada por Natasha Valencic, estudiante de posgrado en Ciencias de la Tierra y Planetarias en la Universidad de Harvard, analizó una base de datos global que incluye información sobre 6.862 represas construidas entre 1835 y 2011. Los resultados demostraron que esta redistribución masiva de agua también provocó una caída de 21 milímetros en el nivel global del mar.
Los científicos explican que la Tierra está compuesta por varias capas, donde la superficie sólida (litosfera) se apoya sobre una capa de magma viscosa. Esta configuración permite que la superficie oscile y se reajuste cuando la masa del planeta se redistribuye, ya sea por fenómenos naturales como el derretimiento de glaciares o por acciones humanas como el almacenamiento de agua en embalses.
Para ilustrar este fenómeno, conocido como desplazamiento polar verdadero, los investigadores utilizan una comparación clara: "Imagine golpear un trozo de arcilla contra un lado de una pelota de baloncesto giratoria: para mantener el impulso, la parte de la pelota con la arcilla se desplazará ligeramente hacia su ecuador y se alejará de su eje de rotación".
El movimiento de los polos ocurrió en dos fases bien definidas. Durante la primera fase, entre 1835 y 1954, la construcción de numerosas represas en América del Norte y Europa desplazó el Polo Norte 20,5 centímetros hacia el meridiano 103 este, que atraviesa países como Rusia, Mongolia y China.
La segunda fase, entre 1954 y 2011, estuvo marcada por la proliferación de represas en África Oriental y Asia. En este período, el Polo Norte se movió 57 centímetros hacia el meridiano 117 oeste, ubicado en el Pacífico Sur y la costa oeste de América del Norte. En total, el desplazamiento durante los casi dos siglos sumó alrededor de 113 centímetros.
Este hallazgo tiene implicaciones profundas para la comprensión del aumento del nivel del mar. "Al retener agua tras presas, no solo se extrae agua de los océanos, lo que provoca una caída global del nivel del mar, sino que también se distribuye la masa de forma diferente en todo el mundo", afirmó Valencic.
El nivel del mar global aumentó un promedio de 1,2 milímetros por año durante el siglo XX. Sin embargo, la humanidad logró retener aproximadamente una cuarta parte de ese aumento gracias a las presas, una cantidad considerable que debe ser incorporada en los modelos climáticos actuales.
El estudio advierte sobre la importancia de considerar la ubicación geográfica de las presas, pues "dependiendo de dónde se ubiquen las presas y los embalses, la geometría del aumento del nivel del mar cambiará". Esto implica que las regiones costeras enfrentarán distintas realidades climáticas según la distribución global de estos embalses.
Los científicos concluyen que "los embalses artificiales de agua contribuyeron significativamente al cambio del nivel medio global del mar durante el siglo XX". La tasa media de desplazamiento polar verdadero fue de 0,30 cm/año en la primera mitad del siglo XX, mientras que en la segunda mitad aumentó a 0,95 cm/año.
Aunque el desplazamiento fue relativamente pequeño, este descubrimiento demuestra que las acciones humanas pueden tener efectos geofísicos complejos y a veces poco visibles sobre el planeta. Los investigadores consideran que seguir explorando la relación entre el almacenamiento artificial de agua y los movimientos terrestres puede ofrecer claves cruciales para enfrentar los desafíos del cambio climático.
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